Pampaneira, 6 de julio de 2025 – El Festival Sulayr cerró con éxito su décima edición tras cuatro intensos días —del 3 al 6 de julio— de actividades culturales que transformaron Pampaneira en un espacio de creación, reflexión y encuentro. Más que un festival, Sulayr volvió a ser un proceso cultural enraizado en el territorio, que se construye colectivamente y desde los saberes locales.
Bajo el lema “Hilos”, esta edición propuso un enfoque transversal que entrelazó las artes, los oficios y las formas de vida que siguen activas en la Alpujarra. La programación, diversa y multisensorial, incluyó música en vivo, danza, circo, teatro de títeres, instalaciones artísticas, talleres, rutas por la naturaleza, presentación de libros y mesas de reflexión. Más de 150 artistas —entre músicos, performers, compañías y creadores visuales— dieron vida a propuestas muy singulares.

Uno de los momentos más significativos fue la mesa redonda sobre el pastoreo, en la que los jóvenes pastores locales, Nerea Estevez, José Gallego y Jorge Gallegos compartieron sus experiencias y desafíos, no como una queja, sino como una afirmación del presente y el futuro de este saber ancestral. El acto se completó con la proyección de un trabajo audiovisual de la reconocida fotoperiodista Susana Girón y una intervención sonora del percusionista Miguel Hiroshi, quien incorporó cencerros de ganado a su set en una exploración sonora del paisaje rural.
Otra cita destacada fue la entrevista pública a José Miguel López, mítico director del programa Discópolis de Radio 3. Conducida por el músico granadino Nicolás Hernández-Carrillo ( El Hombre Garabato) la conversación fue un recorrido íntimo y lúcido por la historia de la música, la radio y la memoria sonora del país.
Pampaneira volvió a convertirse en un gran escenario vivo: las calles acogieron instalaciones artísticas, los tinaos vibraron con cuerdas, cuerpos y voces, y no faltó el chocolate de la Abuela Ili para despedir a artistas y voluntariado. Además, estudiantes de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Granada llevaron a cabo intervenciones artísticas vinculadas al entorno local, reforzando la apuesta del festival por los procesos creativos y la colaboración comunitaria.
El Festival Sulayr sigue creciendo en profundidad y en participación, consolidándose como un espacio donde la música, la cultura y la naturaleza se entrelazan para pensar el presente desde lo colectivo. En esta edición se han abierto nuevas líneas de trabajo, como la investigación sonora del pastoreo, que seguirán desarrollándose en futuras convocatorias.
Porque hay festivales que programan, y hay festivales que tejen. Y Sulayr, una vez más, ha sabido tejer con hilos de muchos colores.