Al-Taha en La Tahá

Festival Al-Taha

La Alpujarra es una tierra tejida con hilos de historia, naturaleza y cultura. Y en ese telar común los Festivales Sulayr. música en los tinaos y Al-Taha. música en las eras ocupan parte del verano de estas montañas de Sierra Nevada. Aunque con lenguajes diferentes comparten una misma visión: activar el territorio a través del arte y el encuentro.

Si Sulayr convierte a Pampaneira en epicentro de la cultura comunitaria, joven y sostenible, Al-Taha hace lo propio en el municipio de La Tahá, integrado por Pitres Mecina, Ferreirola, Fondales, Capilerilla, Atalbéitar, y Mecinilla, donde la música y otras actividades paralelas tienen lugar en plazas, iglesias, eras y senderos. Lejos de competir, estos festivales se miran, se reconocen y se acompañan, como si la sierra misma les tendiera puentes invisibles.

Una alianza silenciosa que vibra en las montañas

Ambos festivales han nacido de un profundo respeto por el entorno, los saberes ancestrales y las nuevas voces que llegan para re imaginar lo rural. Son distintos en su forma —Sulayr es una fiesta de raíz participativa y activista; Al-Taha, un encuentro más íntimo y contemplativo—, pero comparten la convicción de que la cultura puede (y debe) transformar el mundo. O al menos, nuestra forma de habitarlo.

La Diputación de Granada, consciente del valor que tienen estos espacios en la reactivación cultural de la provincia, ha respaldado firmemente ambas iniciativas, apostando por una programación que trasciende el espectáculo y se enraíza en el territorio. Su apoyo no es solo económico: es una declaración de principios. Porque invertir en festivales como Sulayr y Al-Taha es invertir en identidad, en cohesión social y en futuro.

Cuando el arte no se conforma con entretener

Tanto en Sulayr como en Al-Taha, la cultura no es un adorno, sino una herramienta para el diálogo, la sostenibilidad y la vida compartida. En sus escenarios no solo hay conciertos o recitales: hay preguntas, hay memoria, hay comunidad. Y eso es lo que los convierte en algo más que festivales. Los convierte en una forma de resistencia luminosa.

Por eso, este verano, la Alpujarra no solo suena, canta o baila. También piensa, se escucha, se cuida. Y lo hace gracias a estos dos corazones que laten al unísono entre las cumbres: Sulayr y Al-Taha. Porque la montaña es grande, y hay lugar para todos los que vienen a sembrar cultura con las manos abiertas.

El Festival Al-Taha música en las eras se desarrolla en los núcleos de población del municipio de La Tahá, del 23 al 27 de julio de 2025